Ese marido que entra en el dormitorio con una cabra en brazos, su mujer le espera medio dormida en la cama y dice:
- Mira cariño, esta es la vaca que me follo cuando te duele la cabeza.
La mujer levanta la cabeza, le mira y dice:
- Si no fueras tan soplagaitas te darías cuenta que lo que tienes en brazos es una cabra y no una vaca.
El marido la mira fijamente y la dice:
- Y si tú no fueras tan soplagaitas sabrías que estaba hablando con la cabra.
- Mira cariño, esta es la vaca que me follo cuando te duele la cabeza.
La mujer levanta la cabeza, le mira y dice:
- Si no fueras tan soplagaitas te darías cuenta que lo que tienes en brazos es una cabra y no una vaca.
El marido la mira fijamente y la dice:
- Y si tú no fueras tan soplagaitas sabrías que estaba hablando con la cabra.